La edificación con ladrillos continúa siendo la opción más accesible, tanto para el sector público como para el privado, presentándose como el sistema más adecuado para la vivienda social.
La construcción de una pared bajo el sistema tradicional de ladrillos tiene un costo de $624,22 por m2. De esta forma, el costo total de edificación de una vivienda (ya sea unifamiliar o de propiedad horizontal) bajo esta modalidad constructiva alcanza los $25.426,16 por m2*. Así deduce de su último estudio el Grupo UNICER, conformado por 6 plantas fabricantes de ladrillos cerámicos ubicadas en diferentes puntos del país.
“Estas cifras nos permiten reafirmar que la construcción tradicional continúa siendo la opción más rentable para los desarrolladores y la más accesible para aquellas familias que construyen su propio hogar”, afirma el Ing. Ángel Di Benedetto, miembro del directorio del Grupo.
Al desglosar el estudio, se observa que los costos de materiales y mano de obra, y en consecuencia del total de la obra, varían según el tipo de producto utilizado. Cuando se trata de ladrillos cerámicos huecos, la opción más económica es el mampuesto de 8 x 18 x 33 cm: el costo por m2 de construcción con el mismo es de $305,78, considerando $132,29 de materiales y $173.49 de mano de obra.
En el otro extremo, se ubica el ladrillo hueco de 18 x 18 x 33 cm, un producto innovador que rompe con los estándares tradicionales del mercado gracias a su mayor tamaño, que permite agilizar los tiempos de obra y ahorrar energía en la misma. En este caso, el costo por m2 de construcción se eleva a $500,60, contemplando $225,28 de materiales y $275,32 de mano de obra.
Respecto a los ladrillos cerámicos portantes, la opción más económica es la del producto de 12 x 19 x 33 cm -el tamaño tradicional-, que alcanza los $547,67 por m2: $271,01 de materiales y $276,66 de mano de obra. Le sigue el mampuesto de 18 x 19 x 33 cm, con un costo total por m2 de $624,22, ya que considera $302,27 de materiales y $321,95 de mano de obra.
“Este análisis demuestra una vez más que el ladrillo es el material más noble y conveniente para la construcción argentina. No sólo potencia la industria nacional, reactivando la economía del país, sino que también garantiza construcciones sólidas, durables y sustentables”, señala Di Benedetto.
“Es por esto que, desde el Grupo UNICER, creemos que la construcción tradicional es la respuesta a la demanda de vivienda social para paliar el déficit habitacional argentino, que hoy alcanza las 3.300.000 viviendas”, concluye el ingeniero.
*Fuente: Clarín ARQ Cifras